El perdón es ‘la regla de oro’, a través de la cual llegamos
a conectar con nuestro ser.
Es lo único que de verdad alivia y que de verdad sana.
Muchas enfermedades mortales, tienen que ver con el resentimiento, con la culpa…
El perdón, genera una sensación de absoluta libertad,
porqué nos permite desprendernos de esos sentimientos.
Todas las enfermedades del aparato digestivo,
tienen mucho que ver con la actitud de soltar,
de desprendernos de las cosas y no lo sabemos hacer…
La verdadera posibilidad de reedescubrirnos,
en términos de absoluta libertad,
vienen a través del perdón…
Perdonar es un verbo, indica acción.
Pero el hombre siempre se ha preguntado:
¿Cómo perdonar?
Hay mucha gente que te dice:
-’Yo ya perdoné’-
pero se encuentra con la persona perdonada,
o se enfrenta de nuevo a la misma situación y se eriza!
No ha perdonado!
El sentimiento permanece ahí,
te lo dice tu cuerpo, tu energía, el recuerdo…
He conocido a muchas personas,
que en un momento determinado de su vida,
tuvieron mucho dinero,
se asociaron con alguien que provocó su ruina
y a continuación se pasaron veinte años lamentándolo!
¿Qué significa ésto?
Que prefirieron quedarse en el papel de víctima impotente
y arruinada y no con el de persona emprendedora…
Asumieron el papel de víctimas,
se arruinaron y a partir de entonces,
el mensaje que transmiten es:
‘Te voy a demostrar el daño que me hiciste
y puedo llegar hasta lo último en mi vida,
hasta la muerte, para castigarte’.
Y la otra persona está disfrutando con el dinero.
Es gente que se daña a sí misma, por el miedo a perdonar…
No se trata de la falsa noción,
de que perdón es presentarse de rodillas,
ante la otra persona.
Es común esa noción de que perdonar,
‘es volver a meter en nuestra casa,
a la persona que a lo mejor nos sacó de ella’.
Pero no es eso…
Perdonar,
es liberarnos de ese pensamiento,
de ese recuerdo y poner límites de una vez
y decirle a esa persona:
-’Perfecto, fue maravilloso conocerte,
hoy comprendo lo que me enseñaste -
aunque uno no se lo digas así-,
hoy comprendo la lección que me diste…
-’Y ahora, gracias! pero no te quiero más en mi vida’-.
La idea real del perdón,
es llegar a sentir que nunca pasó,
que nunca te hicieron daño, porqué en realidad,
nadie tiene capacidad de hacerte daño.
Si alguien te hiere,
es porqué has puesto tu poder en sus manos
y ese alguien no sabe qué hacer, con ese poder y te agrede.
Tu ser, no puede sufrir ataques
y toda defensa que hagas en tu vida,
va en contra de tu paz…
El perdón es una llave que cierra ciclos.
Independientemente de cómo actúes ante cualquier cosa,
ante una institución o una persona,
siempre terminarás perdonándote a ti mismo,
porqué fueron tus pensamientos,
los que crearon las energías hacia esa persona…
La paz comienza….cuando dejamos de querer…
tener la toda la razón…
*Anónimo